Perdida en el desierto

Mis vistas desde el coche

En una ciudad donde las rotondas desaparecen y los semáforos crecen por la noche, es inevitable perderte...si a eso le añadimos, que mi sentido de la orientación se lo dieron al que iba antes que yo, el acabar en otro país cuando quieres llegar al colegio empieza a convertirse en algo más que normal.
Después de una semana para conseguir aprenderme el camino al colegio, sorteando toda clase de Land Cruiser, sueño con ellos...van mis queridos amigos y cierran otra rotonda...
Mi mente esta limitada a un camino por destino, y aquí la pobre, igual que el navegador se pasa el día recalculando....
Con el navegador en la mano y el mapa en la boca, parezco como dice mi amiga Laura, Dora la exploradora...
Después de hora y media aproximadamente, aquí calcular el tiempo es algo difícil ya que no se porque extraña razón, no se usa para el día a día, el tiempo no existe..., es algo que se han inventado para hacernos coincidir a todos en el mismo sitio y en el mismo lugar y formar monumentales atascos.
Parece que a lo lejos se dibujan unos camellos...¡¡Gonzi la cabalgata¡¡¡¡
Mi hijo me mira como si estuviera loca y me dice :Mamá, quedan mas de 6 semanas para que lleguen los Reyes Magos, claro cariño, es que como salen desde aquí ya se están preparando, para llegar a casa el 6 de Enero.
Pero no son magos??? buena pregunta...
Si ya están aquí, a lo mejor me dejan la play 4 mañana por la noche...
Si esto de perderse... me va a traer alguna que otra consecuencia con la que no contaba...
El GPS sigue recalculando, continúe durante 50 km y haga un cambio de sentido...
Me topo con un puesto fronterizo....hay madre¡¡¡
Buenos días señora
Pasaporte por favor
Creo que esto no es el colegio...
Solventado el problema dos horas más tarde, veo la luz al final del túnel...a este le debió pasar lo mismo y decidió no alejarse de ella nunca más